FRANCISCO
¿Estamos dispuestos a ser cristianos coherentes, las 24 horas del día,
dando testimonio de palabra y con el propio ejemplo?
Todos somos pecadores. Pero pidamos al Señor no seamos hipócritas. Los
hipócritas no saben lo que es el perdón, la alegría, el amor de Dios.
Si Jesús es el sentido de nuestra vida, no podemos permanecer
indiferentes ante quien sufre, ante quien está triste.
No olvidemos nunca que es el Señor el que guía a la Iglesia y hace fecundo nuestro apostolado.
El cristiano está siempre dispuesto a anunciar el Evangelio, porque no
puede guardar para sí mismo el gozo de conocer a Cristo.